Gilda tenía su vida resuelta. Jubilada y su esposo también, vivían del arriendo de una casa que hace 27 años habían comenzado a construir y que últimamente les quedaba grande, ya que sus hijos habían partido.
Entre la nostalgia y el dolor, la mujer comenta que decidió junto a su esposo mudarse a una casa de al lado, la que en un comienzo funcionaba como minimarket, pero ante los constantes robos, decidieron transformar en su hogar. En la nueva vivienda solo había una habitación, pero era un lugar acogedor para estar mientras arrendaban su antigua casa a empresas constructoras.
Pero la vida tranquila de Gilda y su familia cambió el 4 de enero. Un incendio destruyó parte de sus recuerdos. Ella afirma que perdió más que paredes, ladrillos y tablas; su independencia es lo que más le ha costado dejar atrás.
Gilda no quiere depender de sus hijos y cercanos. Por eso, quiere darle una vuelta al destino a menos de una semana de una de las tragedias más terribles que le ha tocado enfrentarse. Perder todo de un momento a otro. Ni su automóvil se salvó. Decidida, afirma que tiene que volver a empezar, pero su gran pregunta es ¿cómo?
Para conocer más sobre Gilda, su historia y los recuerdos de su hogar, puedes ver el video aquí. CHH
