Un restudio reciente reveló que la comida y el estado de ánimo se relacionan directamente, incluso pudiendo llevar a algunas personas a fuertes depresiones.
La investigación fue realizada por el equipo de Lina Begdache, profesora de estudios de salud y bienestar de la Universidad de Binghamton (Nueva York), donde se demostró que la comida rápida es generalmente rica en ácidos grasos saturados y omega-6, lo que puede producir respuestas en el cuerpo que se relacionan con la ansiedad y la depresión.
Junto con esto, se mostró que los jóvenes menores de 30 años que comen este tipo de alimentos más de tres veces a la semana tienen mayores niveles de angustia, según consignó La Vanguardia.
Incluso se observó que los que consumían carne tres veces a la semana demostraban tener más problemas de salud mental. Esto, indicó Begdache, “nos sorprendió”. Sin embargo, su razón sería que el estado de ánimo y la carne están relacionados a nivel celular: el triotófano que está en este alimento es un precursor de serotonina, la sustancia del cerebro que produce la ansiedad, el insomnio y el estrés.
En tanto, para los mayores de 30 recomendaron comer menos carbohidratos y más frutas para reducir la depresión, señaló la investigadora. CHH