Los Smoothie Bowl son una opción perfecta para satisfacer el diente dulce por la mañana de la manera más saludable posible. Olvídate de azúcares innecesarios, como la mermelada, o de comer pan todos los días a primera hora de la mañana en esta cuarentena. Estos desayunos tienen increíbles beneficios para la salud y son riquísimos. Además, lo que es mejor aún, ¡son moldeables a tus gustos!
Sigue los siguientes pasos para descubrir cómo hacer tu smoothie bowl y luego personalízalo. La receta a continuación es muy querida por los veganos, ya que contiene muchas proteínas, frutas (que es mejor comerlas siempre por la mañana) y fibra, además de otros nutrientes esenciales.
INGREDIENTES A LA JUGUERA:
1. Elige la base de tu smoothie
Todo smoothie bowl debe llevar al menos una fruta congelada. Esto para darle los primeros y básicos nutrientes, además de otorgar la consistencia necesaria. Puedes escoger las que quieras: manzana, frutos del bosque, mango, pera o melón, entre otros.
Para esta receta vegana, agregaremos 1 plátano (potasio para hacer deporte después, carbohidratos para darte energía y proteínas) y media taza de frutos del bosque (mezcla de antioxidantes, indispensables después de hacer deporte, manganeso, fibra y vitamina C).
Es recomendable que, si te gusta el plátano, le agregues a tu smoothie cada vez que puedas, ya que le da una consistencia cremosa a la mezcla.
2. Elige tus vegetales crudos
Aunque no siempre es necesario agregar vegetales crudos a tu smoothie, es recomendable solo por el mero hecho de agregarle valor nutricional a tu desayuno. Muchos de los vegetales que se utilizan ni siquiera se sienten en el smoothie, sin embargo, estarás agregando increíbles vitaminas. Palta y kale son algunas de las opciones. La plata apenas se siente y otorga grasas saludables que te mantendrán satisfecha/o por más tiempo. El kale aporta minerales y vitaminas esenciales, como el hierro y la vitamina K.
Para esta receta, agregaremos 1/2 taza de espinacas, completamente insípido dentro de tu smoothie, y que aporta vitaminas C, E, K, B6, B2, B1 y ácido fólico.
3. Incorporar un líquido
Para dar consistencia, es necesario agregar algo líquido a la mezcla. Cualquier leche sirve, incluso agua. Leche de soja, almendras, coco, arroz o avena. Para esta receta, y para agregar más beneficios al bowl, utilizaremos 1/2 taza de leche de almendras, lo que contiene una buena cantidad de calcio y proteínas.
4. Proteínas a tu smoothie.
Para cargarnos de energía es necesario agregar un par de cucharadas de proteína vegetal al desayuno, sobre todo para vegetarianos y veganos. Elige 2 cucharadas de cualquiera de las siguientes proteínas: Semillas de chía, Semillas de lino, Mantequilla de almendra o maní, Yogurt de coco, Avena, Espirulina o proteína en polvo.
Para esta receta, utilizaremos dos ingredientes proteicos: una cucharada de mantequilla de almendra y otra de espirulina.
5. Agrégale más sabor (opcional)
Dale un toque personalizado a tus gustos: con una cucharadita de aderezos podrías darle un poco más de energía y sabor a tu desayuno. Jengibre, canela, cacao, limón, vainilla, matcha, acaí o cúrcuma son algunas opciones. En este caso, agregaremos esencia de vainilla para acentuar sabores.
6. Tritura todo en una juguera o similar y viértelo en un bol.
Es recomendable utilizar una batidora de alta potencia para que todo se mezcle adecuadamente.
TOPPING
Esta es la parte estética y divertida que ves en instagram. ¡Decora tu smoothie como quieras! Con frutos secos, frutos deshidratados, semillas, coco rayado, granola, goji berries, avena, agave o jarabe de maple para darle más dulzor, etc.
Para esta receta, aprovecharemos los frutos del bosque y añadiremos un poco de frutillas, hojuelas de coco, castañas de cajú y cacao nibs. ¡Puedes ponerle lo que tengas en tu hogar!
Atrévete a un desayuno nutritivo y a experimentar con tus smoothie bowls. Seguro encuentras el sabor que más te guste para empezar el día con muchos de los nutrientes que requieres para tu salud. CHH