A pesar de que últimamente se ha tratado de masificar el uso de energía solar en Chile, lo que trae grandes beneficios, no hay avances significativos debido al aspecto financiero de esta solución, barrera principal para quienes deseen instalar artefactos como paneles térmicos (calientan el agua) y fotovoltaicos (generan electricidad).
Según consigna Emol, en cuatro años los costos se han reducido prácticamente a la mitad, pero esto no es suficiente, ya que la inversión inicial es bastante alta.
“Si te compras un calefón, después debes comprar el gas cada mes. Esto es como si tuvieras que comprar el calefón y, al mismo tiempo, el gas de los próximos 20 años de una sola vez”, señala a Emol Gabriel Neumeyer, presidente de la Asociación Chilena de Energía Solar (Acesol).
Según la asociación, en promedio se instala por casa 1 a 2 kilowatt (KW), equivalentes entre 4 a 8 paneles. Dos de ellos, tienen un costo aproximado de un millón de pesos.
Sin embargo, es importante recalcar los beneficios del uso de esta energía. La Ley de Generación Distribuida o Net Billing, que está en vigencia desde octubre de 2014, señala que aquellas personas que tengan paneles solares podrán ahorrar en sus cuentas de luz, pero adicionalmente podrán inyectar sus excedentes de electricidad a la red y recibir un pago por esto al final del mes.
Debido al costo de la instalación, muchas veces este tipo de energía resulta más rentable para el banco, ya que otorgan créditos para financiarla. Por lo mismo, el ministro de Energía, Máximo Pacheco informó a Emol que “hemos conversado con el Banco del Estado y tenemos una línea de crédito que el banco va a abrir para que las personas que quieran instalar un techo solar lo puedan hacer con un financiamiento de mediano y largo plazo que pueda ayudar a que esta inversión se pague con el propio ahorro que se genera en la energía”.
Lo anterior, se espera que esté operativo a principios de 2017. CH H