Un oncólogo del West China Medical Center de la Universidad Sichuan en Chengdu, China, estudió la relación entre trabajar de noche o de día y el riesgo de contraer cáncer.
Los resultados arrojaron que en Europa y Norteamérica, las mujeres que trabajan de noche tienen un 19% más de riesgo de contraer la enfermedad que aquella con jornada diurna.
Sin embargo, no ocurrió lo mismo en Australia y Asia, pero fue sorpresivo que se encontraran relaciones entre ambas cosas: “nos sorprendió ver la asociación entre el trabajo nocturno y el riesgo de cáncer de mama solo entre las mujeres de Norteamérica y Europa”, señaló el autor del estudio, Xuelei Ma, quien añadió que “es posible que las mujeres de esos lugares tenga niveles más altos de hormonas sexuales, que se han asociado positivamente con cánceres relacionados con hormonas, como el cáncer de mama”.
Estas conclusiones se suman a otros estudios que han demostrado que el trabajo nocturno puede alterar los ritmos cardíacos, provocando cambios hormonales y metabólicos, que pueden aumentar el riesgo de cáncer, diabetes y depresión. CH H
