Según el último informe MOVID-19, que elabora el Colegio Médico, la Universidad de Chile, y otras entidades, para dimensionar los efectos de la pandemia en el país, el coronavirus ha acentuado la brecha entre hombres y mujeres, en diversos ámbitos.
El estudio, cuyo objetivo era analizar la situación de las mujeres y trabajadoras de la salud en medio de la crisis sanitaria, determinó que en todos los aspectos evaluados, la situación de las entrevistadas es «considerablemente peor que la de los hombres», de acuerdo a 45.499 respuestas de la encuesta.
En cuanto a las diferencias, en primer lugar el informe mostró que la inestabilidad laboral a la que las mujeres se ven normalmente expuestas se ve acentuada en el contexto de la crisis sanitaria. En detalle, se indicó que la incertidumbre laboral está particularmente presente entre mujeres que no han terminado su educación media. En particular, 49,2% de estas mujeres estima que es totalmente o muy probable que la empresa donde trabajan quiebre en los próximos tres meses, mientras que el 61,7% estima que las deudas de su hogar aumentarán. Estos porcentajes son notoriamente mayores a los reportados por hombres de distintos niveles educativos y por mujeres con mayor nivel educacional, afirmó el estudio.
Sumado a lo anterior, el reporte afirmó que más allá de las mayores cifras de desempleo, la percepción de inestabilidad laboral entre mujeres con niveles educacionales más bajos da cuenta de una sensación de desprotección social en el contexto de la crisis. «Este dato también pone de manifiesto las diferentes realidades que la pandemia genera para mujeres de distintos estratos sociales. Por otro lado, el cierre de establecimientos educacionales conlleva un aumento de tareas de cuidado y educativos en el hogar para mujeres, lo que afecta su desempeño laboral y su posibilidad de reingresar al mundo laboral post-pandemia», reveló el informe.
Salud mental
«Las mujeres son también las que han visto su salud mental mayormente afectada», indicó el informe. Así, el 55,8% de las mujeres respondió que su estado de ánimo ha empeorado durante los meses de crisis sanitaria, mientras que solamente el 42,8% de los hombres estimó lo mismo. Las mujeres también mencionaron, en mayor medida que los hombres, la presencia de problemas para dormir, sentirse bajoneadas o deprimidas, así como nerviosas o ansiosas. «Estos indicadores de salud mental más negativos en mujeres podrían reflejar la sobrecarga que las mujeres tienen en relación a los cuidados del hogar, la preocupación con la potencial pérdida de su fuente laboral y el aumento de expresiones de violencia de género en contexto de cuarentenas», explicaron.
Bienestar de trabajadoras de salud
Finalmente, el estudio señaló que «el grupo de mujeres que requiere particular atención en el contexto actual es el de las trabajadoras de salud». Las trabajadoras de salud no solamente corresponden al mayor porcentaje de la fuerza laboral en salud, sino que también tienden a ocupar cargos que involucran mayor interacción con pacientes, aseguraron.
De esta forma, los resultados de MOVID-19 mostraron que las mujeres trabajadoras de la salud tienen más contacto con personas COVID-positivas, en comparación con los hombres trabajadores de la salud. Por ejemplo, la semana del 8 de junio, un 11,9% de las mujeres trabajadoras en salud indicó haber tenido contacto con una persona COVID-positiva, mientras que este valor se reducía a 6,9% de los hombres trabajadores en salud, al 5,0% de las mujeres no trabajadoras en salud y al 3,5% de los hombres no trabajadores en salud.
Así, las trabajadoras en salud presentaron una exposición mayor en un 72,5% a los hombres trabajadores en salud y mayor en un 138% a la exposición de mujeres no trabajadoras en salud. «Estas cifras resaltaron la necesidad de asegurar elementos de protección personal para el equipo de salud completo, y manifestaron la relevancia de considerar las distintas necesidades y circunstancias de distintos grupos de mujeres», estimó el informe.
Debido a lo anterior, el documento llamó a generar políticas públicas de protección del empleo que logren reducir la pérdida del trabajo entre mujeres. Además, invitaron a aumentar el apoyo psicosocial a mujeres y fortalecer la corresponsabilidad social en el hogar, fortalecer la ayuda a los trabajadores de la salud y a aprobar el postnatal de emergencia. CHH