Por Javiera Cisternas, periodista Chicureo Hoy.
Muchas mamás y papás ven que ha llegado el calor y consideran que es la mejor etapa del año para que los pequeños dejen sus pañales y pasen a la etapa de usar calzones o calzoncillo. En muchos casos el proceso se transforma en un éxito y en otros todo lo contrario. Por esta razón Chicureo Hoy, entrevistó a Carolina Silva, kinesióloga especialista en Disfunciones del Piso Pelviano, quien nos cuenta un poco como sobrevivir al proceso.
Los niños nos pueden entregar señales que nos ayudarán a darnos cuenta que efectivamente están más preparados para sacar sus pañales, Carolina nos explica que es importante tenerlas en cuenta antes de tomar la decisión: “Revisar que haga sus deposiciones con horarios más o menos determinados, que se pueda transportar solito o solita, que su motricidad fina esté más desarrollada, que se mantenga por sí mismo sentado y que tenga interés en imitar lo que hacen sus papás o hermanos mayores, como peinarse, ponerse zapatos, pueden comenzar a darnos luz verde para este proceso”, explica la especialista.
Esto también nos demuestra que es un proceso muy personal en los niños y que cada uno va tomándolo a su propio ritmo, aunque a veces y por diferentes razones, como papás nos vemos obligados a acelerarlo un poco. Para que este proceso sea un poco más fácil y exitoso, Carolina nos entrega los siguientes tips que servirán de ayuda:
-Hacerle horarios para que vaya al baño, idealmente cada dos horas a orinar y siempre después del desayuno para la deposición.
-Invitarlo a que es un juego y algo nuevo, donde él o ella son los protagonistas.
-Nunca dejarlo más de 10 minutos sentado en su bacinica o pelela. “Esto es porque al estar mucho tiempo sentados en la bacinica, los músculos del piso pelviano y los esfínteres se relajan durante mucho tiempo, quedando distendidos, lo cual podría ocasionar disfunciones y consecuencias negativas a futuro”, aclara la especialista.
-Nunca compares con sus hermanos mayores, primos o amigos. Cada niño es individual y este es un proceso personal.
-Cuando vaya al baño no apurarlo ni tampoco distraerlo con cosas diferentes. Idealmente tenerle libros o música relacionados al tema.
-Nunca retarlo si no avisa. Recordar que nosotros somos los adultos y estamos enseñado algo complemente nuevo para ellos.
-Ubicar la bacinica o pélela en un solo lugar de la casa y no moverla de un lado a otro. De esta forma el niño o niña asociará las sensaciones internas con un lugar determinado donde evacuar la orina y fecas.
-Cambiar los pañales con tiritas por los que se suben y bajan como ropa interior, lo que les hará más fácil el proceso. Además tratar que la ropa sea con elásticos sin cierres o botones para que sea más cómoda de subir y bajar.
-Cuando pase el proceso del día y se comience a preparar para dejar los pañales en la noche, es importante dejar de darle agua dos horas antes de que se vaya a dormir.
Cuando comience el proceso de dejar el pañal la paciencia y el cariño con los niños es lo más importante, aunque a veces no es fácil, es parte de su desarrollo. Recuerda además andar siempre con más de una muda de ropa completa en caso que algún “accidente” pase fuera de casa. CH H