Ya comenzaron las vacaciones de verano, por lo que los niños y niñas pasarán mayor tiempo en la casa. Este cambio de rutina podría provocar algunos desajustes en sus hábitos alimenticios, por eso hay que tener precaución con sus comidas.
Desde el Ministerio de Salud señalan que es importante prestar atención en la nutrición de los más pequeños de la casa, teniendo como prioridad su desarrollo físico y mental. En ese sentido, hay que poner ojo en el aumento de comidas y bebidas poco saludables que pueden afectar su peso y su salud en general.
A la situación de la comida se suma el sedentarismo que predomina en los niños, debido al incremento en la utilización de aparatos tecnológicos como tablets, consolas, celulares y computadores.
“Lo primero es que en las casas les tengan un horario, es muy importante que niños y niñas tomen su desayuno todas las mañanas, tengan su almuerzo, su once o cena. Junto con esto cuidar que las porciones sean las adecuadas para cada etapa del desarrollo porque así prevenimos que haya sobrepeso u obesidad a futuro”, explica Nayade Guerrero, nutricionista del Hospital de Peumo.
Asimismo, la nutricionista manifiesta que es “muy importante que los padres también se preocupen de que los niños no estén todo el día en el computador o no estén todo el día en los teléfonos”.
“Eso a la larga le va a afectar en su gasto calórico diario, lo que puede producir una acumulación en cuanto al peso y vamos a desarrollar lo que es obesidad, sobrepeso en los niños y hasta enfermedades crónicas que hoy en día se da mucho en menores de 18 años”, detalla Guerrero.
Mantener saludables a los niños y niñas puede ser una tarea compleja. que implica desafíos de creatividad y esfuerzo constante, por eso el Ministerio de Salud hace un llamado a mantener horarios, estar atentos a los alimentos que consumen y a incentivarlos con actividades que signifiquen un gasto calórico. CHH