Un estudio realizado por la compañía global de ciberseguridad Kaspersky, en conjunto con la consultora de estudios de mercado CORPA, reveló que más de la mitad de los niños en Chile posee una cuenta en redes sociales, y que el 12% de los padres desconoce por completo la información que su hijo comparte en su perfil.
Según demostró la investigación, los menores cuentan con sesiones en Whatsapp, Instagram, YouTube y Facebook y, en promedio, en el 44% de los casos, crearon por sí solos sus cuentas y acceden a ellas sin la supervisión de sus progenitores. Por su parte, el 11% restante de los perfiles fue creado por los padres de los niños y son ellos quienes los administran.
En cuanto a los adultos encuestados, un 66% dijo que lo que más comparten públicamente los menores es información de sus hobbies o actividades favoritas, 13% fotografías del hogar y 5% datos personales de amigos y parientes.
En tanto, el sondeo evidenció que el 28% de los padres rara vez monitorea las redes sociales de sus hijos, y que incluso el 37% desconoce la contraseña de esos perfiles.
Cabe destacar que el informe se enmarca en la “Campaña Niños Digitales”, la que busca analizar qué tan involucrados y comprometidos están los padres y madres de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y Perú, en la vida digital de sus hijos.
Conectados a temprana edad
La investigación reveló, además, que el 42% de los menores chilenos interactuó por primera vez con un dispositivo inteligente antes de los 6 años, y el 76% obtuvo su primer smartphone o tableta personal antes de cumplir 10. Según los padres, los menores de edad utilizan estos aparatos en mayor medida para entretenerse (65%) y educarse (34%), y luego para comunicarse con otras personas (20%).
Junto con esto, el sondeo arrojó que el 21% de los niños pasa más de cuatro horas conectado a internet mediante un dispositivo móvil.
Carolina Mojica, gerente de ventas de productos para el consumidor de Kaspersky, afirmó al respecto que “los niños de hoy están creciendo en un mundo que gira alrededor de Internet. Es imposible evitar que tarde o temprano empiecen a interactuar con todo lo digital y, en especial, con las redes sociales. Si ya son parte de ellas, es importante supervisar lo que publican y explicarles porqué lo hace. Incluso, los adolescentes pueden no tener claro cuál es el impacto a largo plazo de sus publicaciones, o no entender que el Internet nunca olvida nada».
En esa línea, explicó que «por eso es importante enseñarles que practiquen buenos hábitos en línea desde una temprana edad, hablarles sobre las ciberamenazas para que aprendan a reconocerlas y evitarlas, creando así una base de confianza y un diálogo abierto”. CHH
