Por Constanza Trincado, periodista Chicureo Hoy
Trabajar y ser mamá a la vez puede ser una tarea muy difícil. Así lo definen estas hermanas, Piera y Antonella Bencini. Hace pocos años ambas fueron mamás y la vida les cambió rotundamente. Estaban acostumbradas a trabajar todo el día en grandes empresas. “Estar fuera de la casa y querer una crianza respetuosa y de apego era prácticamente incompatible”, señala Antonella. Por lo mismo, juntas decidieron solucionar su problema, y quizás el de muchas mamás, e iniciar un proyecto de emprendimiento.
“Jardín Kangaroo” se llama el proyecto que decidieron comenzar juntas en marzo de este año. Ambas son psicólogas y le dan mucho énfasis a la crianza de apego y estimulación de los niños, un tipo de educación fundamental en este jardín que educa además con la metodología High Scope.
La idea surgió en base a las experiencias que estas hermanas tuvieron con sus hijas. “Nuestro enfoque siempre fue hacer un jardín para mamás como nosotras. Pensamos en aquellas que trabajan todo el día y por eso, tratamos de solventar todas las necesidades de los niños”, afirma Piera a Chicureo Hoy.
Visitaron terrenos en Santiago, pero decidieron que Chicureo era ideal por los terrenos grandes y por los espacios, factor que podía alinearse con las expectativas de jardín que tenían y lo que era óptimo para los niños.
Finalmente, decidieron trasladarse al sector junto a sus familias y comenzar esta aventura.
Piera y Antonella no habían trabajado antes en jardines y a pesar de que su profesión está ligada a este ámbito, decidieron contratar a una directora especializada y con una larga trayectoria en este ámbito, para darle mayor peso al proyecto. Junto a la ayuda de educadoras, comenzaron a funcionar hace pocos meses.
“La acogida que tuvo el jardín en los padres de la zona fue increíble”, señala Piera. A pocos meses de su partida, hoy cuentan con alrededor de 45 niños que van desde sala cuna hasta transición, una cifra que esperaban tener al cabo de dos años. El tema de la crianza respetuosa y de apego es algo que han valorado los padres. Lo anterior, complementado con la metodología High Scope que se centra en que los niños descubran y exploren el mundo por sí solos generando con ello un aprendizaje, es lo que estas emprendedoras ofrecen como proyecto educativo.
Kangaroo además es bilingüe. En base a sus experiencias, ambas consideran que esto es un aspecto de gran importancia para el futuro de sus alumnos y fundamental para su desarrollo. También fomenta el deporte para los niños, y para esto cuenta con un gran patio grupal y una cancha de pasto donde desarrollan distintas actividades. Estar conectados con la naturaleza también forma parte de la visión del establecimiento. Cada niño tiene su árbol, el cual van regando todos los días y, de esta manera, se hacen partícipes de un proceso. Junto a lo anterior, cuentan con un huerto y en un tiempo más también podrán disfrutar de una granja educativa.
El Jardín Kangaroo abrió sus puertas en marzo de este año FOTO: Chicureo Hoy
Para Piera y Antonella, este emprendimiento tiene un gran valor. “Estamos contentas y orgullosas de este proyecto. Sabemos que para las mamás es súper difícil compatibilizar el trabajo con la crianza y, en ese sentido, ellas están muy agradecidas y eso se nota”, afirma Piera. El tener la posibilidad de criar a sus hijas en su lugar de trabajo, y sobre todo con esta metodología, le genera gran seguridad y confianza. “Queremos transmitir nuestra experiencia de crianza al resto de los papás con el fin de darles seguridad de que sus hijos están bien contenidos”, indica.
Gracias a sus conocimientos, al equipo que han seleccionado y al tiempo dedicado, planean crecer cada vez más y convertir este proyecto educativo en un jardín integral
Para más información pueden visitar la página www.jardinkangaroo.cl. CH H
