Con la vuelta a clases los niños utilizan más el computador y por lo mismo se hace más necesario tomar algunas medidas para evitar exponerlos a riesgos como el sexting, grooming y cyberbullying. Instalar el computador en un lugar común, compartir la misma contraseña con el niño en el mail y redes sociales, además de activar el control parental, son sólo algunas de las recomendaciones.
En la espera de la fila del supermercado, mientras sus padres conversan con amigos o simplemente cuando están aburridos, gran parte de los niños pide el celular o la tablet para jugar e ingresar a Internet. De hecho, según datos del estudio de VTR Internet Segura, un tercio de los niños de tres años en Chile ya accede a uno de estos dispositivos móviles.
El incesante acceso a Internet expone a los pequeños a contenidos no aptos y a numerosos riesgos. Entre ellos, al sexting o envío de contenidos eróticos o pornográficos por medio de teléfonos móviles; al grooming, que son acciones deliberadas por parte de un adulto para establecer lazos de amistad con un niño o niña en Internet, con el objetivo de obtener imágenes eróticas o pornográficas del menor; y al cyberbullying, que define al acoso psicológico que se produce entre pares a través de los medios digitales.
¿Qué se puede hacer para proteger a los niños en Internet?
“Lo primero es la educación. Antes de reducirle el acceso a los niños a cualquier contenido en Internet, hay que educarlos. Los niños aprenden de las cosas que ven. Por eso, si ven al padre que está pegado con las pantallas, al celular, al tablet, van a imitar esa conducta. Lo importante es que el papá entienda que es el reflejo de lo que va a hacer su hijo”, asegura Guillermo Bustamante, coordinador de la Escuela de Comunicación Digital y Multimedia de la Universidad del Pacífico.
Uno de los mayores desafíos es saber lidiar con niños que son “nativos digitales”, es decir, para quienes las pantallas y tecnologías asociadas han estado desde sus primeros días de vida ahí. “Para los niños el Internet es algo transparente y por eso hay que educarlos. Si bien hay riesgos en Internet, no se trata de que se le pongan muchas trabas al niño para que lo ocupe. Decir frases como ‘no te metas a Internet porque te pueden pasar muchas cosas malas’ va a hacer que ese niño se crie en una burbuja y luego cuando acceda a internet no sabrá cómo desenvolverse”, advierte Bustamante.
Según estudios, hoy en Chile un 40% de los niños de cinco años ya tiene un celular propio con acceso a Internet, por lo que es clave enseñarles desde pequeños a manejarse de manera correcta. “Lo importante es ir abriéndole el abanico de lo que se puede hacer en la red. Por ejemplo, hay muchos juegos que son educativos, donde se le puede enseñar al niño a leer, a escribir, a aprender idiomas, etc. Es importante empezar con lo educativo”, aconseja el experto.
Según un estudio en Alemania, casi la mitad de los menores de entre 8 y 14 años revelaron sin querer datos personales en la red. Un problema grave que es común hoy en día. “El niño tiene que saber para qué va usar Internet y qué es lo que va hacer. Es importante que el pequeño navegue junto a uno de sus padres. El uso de la tecnología puede servir también para generar apego, ser una instancia para que compartan y aprendan juntos”, recalca el docente de Comunicación Digital y Multimedia de la U. del Pacífico.
8 claves para aplicar en casa
Una vez que los padres hablen con sus hijos de qué es Internet, para qué sirve y los peligros con los que se pueden encontrar, se sugiere continuar con las siguientes ocho medidas concretas:
-Usar el computador en espacios compartidos: Debe estar en un lugar de la casa que permita que los padres y los demás miembros de la familia vean qué está haciendo el niño y puedan controlar los sitios a los que ingresa y además cuánto tiempo usa Internet.
-Bloquear sitios y palabras: Es importante que el equipo tenga ciertas restricciones, como bloquear sitios y palabras inadecuadas. Configurar la privacidad del navegador (Chrome, Internet Explore, etc.) para que cuando el niño navegue pueda hacerlo sólo por sitios confiables.
-Revisar sus interacciones en Internet: Los padres deben tener acceso a las cosas que el niño ve. No está mal revisar los historiales, pero no es aconsejable hacerlo como una “cacería de brujas”, sino para conversar y educar sobre el contenido de los sitios visitados.
-Fijar horarios y deberes: No se sugiere restringir demasiado el acceso a Internet, sino más bien conversar el tema y fijar los horarios y la cantidad de horas que el niño va a tener acceso a la red.
-Manejar las contraseñas: Si el niño se crea un correo o una cuenta en una red social, es importante que sus padres manejen las mismas contraseñas, con el acuerdo de que ninguno borre el contenido.
-Hablar sobre los peligros en Internet: Hay que enseñarle al niño que tiene que saber con quién está hablando y que no debe creer 100% en la otra persona que está detrás de la pantalla. También que nunca debe mandar una foto y jamás decir su ubicación ni con quién está.
-Preocuparse de que en su celular estén solo los contactos de amigos y familiares cercanos: El niño tiene que entender cuáles son los riesgos de contactarse con extraños y se debe fomentar la confianza para que cuente si algo le pasa.
-Crear perfiles y sesiones diferentes: En sitios como Netflix es muy importante crear perfiles distintos, uno para niños y otro para adultos. También en computadores y/o tablet se recomienda tener sesiones diferentes. CH H